2da Declaración de La Caleta
Congreso Nacional de Jóvenes: “Tecnología verde”.




Los tiempos actuales son testigos del amplio desarrollo y expansión de los adelantos tecnológicos y científicos, que forman parte de la dinámica de vida de la mayoría de la humanidad y que afectan los ámbitos económicos, políticos y socioculturales. Estos cambios tecnológicos y científicos profundos se dan en paralelo, y en ocasión conectados, al fenómeno progresivo de deterioro ambiental.

Aproximadamente veinte mil (20,000) especies únicas desaparecen de este planeta para siempre cada año, o sea dos especies por hora. No cabe duda que la extinción de las especies y la reducción de la biodiversidad es el combustible que sostiene el creciente progreso de la maquinaria de esta civilización.

El nivel del mar aumentará probablemente entre 9 y 88 centímetros en el presente siglo, debido al calentamiento global, causando problemas y daños generalizados, amenazando principalmente a ciudades costeras y países de poca altura sobre el nivel del mar.

Los últimos doscientos años de desarrollo tecnológico, iniciados porla Revolución Industrial y continuados por la Revolución Verde, caracterizados por el surgimiento de la máquina de vapor, el automóvil, el plástico, el uso de los combustibles fósiles, la industria química y farmacéutica , la minería a cielo abierto, la tecnología de la computación, los fertilizantes y pesticidas de carácter industrial y la energía nuclear, han sido también los doscientos años decisivos para aumentar la huella humana y poner en peligro la sostenibilidad del planeta.

Ciertamente, el avance exponencial de la ciencia y las aplicaciones tecnológicas han facilitado la forma como la humanidad produce, convive y se relaciona. Han generado cambios abruptos en la estructura económica mundial, facilitando procesos industriales y de servicios que antes de su desarrollo era impensable concebir su realización.

No obstante, el desarrollo y la eficiencia alcanzada por la ciencia y la tecnología, los resultados en cuanto a la sostenibilidad, han generado cada vez más escepticismo y preocupación por la correlación cada vez más perceptible entre el desarrollo de las tecnologías y el deterioro progresivo del medio natural.

Constituye entonces unos de los principales retos de la humanidad en el presente siglo, armonizar el estilo de vida propio de la sociedad post-moderna actual, preñada de artefactos, objetos e implementos tecnológicos, con la imperativa y angustiante necesidad de lograr un medioambiente sano.

Se trata de asumir un compromiso vinculante, de carácter global que obligue, por el interés supremo de quienes habitamos este planeta, que las naciones hagan suyo el compromiso de producir, organizar y repensar sus paquetes tecnológicos de cara a evitar la implementación de éstos en detrimento de la salud ambiental y de la sostenibilidad misma de la vida en el planeta.

Este objetivo pudiera ser alcanzado con una buena dosis de voluntad política para anteponer el interés de la humanidad, al interés económico de los países y sus corporaciones.

La desigualdad de condiciones para el acceso a la tecnología constituye un gran obstáculo, en ocasiones infranqueable, para las naciones no creadoras de tecnologías, lo que somete a las naciones subdesarrolladas a una especie de dependencia tecnológica. Por dicha razón, los grandes retos por los que atraviesa la conciliación del medioambiente con los adelantos tecnológicos, tiene que ser el resultado del convencimiento de las naciones del centro del desarrollo económico de que estamos en la encrucijada vital para el destino de los 6 mil millones y tantos habitantes que queremos y amamos la vida en naturaleza. Pero, sin un compromiso decidido de todas las naciones y empresas, y de sus poblaciones y entidades, particularmente de sus nuevas generaciones, no será posible el objetivo de hermanar los adelantos técnicos-científicos a los requerimientos que la realidad del medioambiente y la naturaleza a nivel mundial ameritan.

Estamos convencidos de que si bien el manejo inadecuado de la tecnología en un pasado pudo contribuir a afectar el planeta, la reversión de este proceso y la consecución de la sostenibilidad del mismo, dependerá del buen uso de tecnologías amigables y sustentables, cada vez más extendidas y necesarias.

La tecnología, como un instrumento al servicio de la humanidad, como un recurso que ha sabido jugar su rol en la facilitación, eficientizacion y modernización de la vida en sociedad ha de servir también para salvar la vida en el planeta.

Por tanto, los delegados y delegadas firmantes de la Declaración de La Caleta, generada en el ll Congreso Nacional de Jóvenes “Tecnología Verde”, dejamos constancia de nuestras propuestas, que nos permitan promover a todos los niveles un uso responsable y progresista de las herramientas que los avances tecnológicos nos proveen por el bien de todos y todas.

Propuestas:

1. Instamos al Estado Dominicano a aumentar su inversión y aprovechar significativamente los recursos existentes en materia de investigación y desarrollo, incrementando los presupuestos de los Centros de Investigación y las instituciones académicas.

2. Solicitamos a las Instituciones academicas dominicanas la creación de institutos y proyectos de investigación destinados a experimentar y crear con nuevas tecnologías amigables al medioambiente.

3. Proponemos al Ministerio de Medio Ambiente la creacion de programas y divisiones orgánicas para promover y fiscalizar el buen uso de tecnologías amigables con el medioambiente en empresas y en el Estado.

4. Solicitamos al Ministerio de Industria y Comercio, a PROI-INDUSTRIA, al Centro De Exportación e Inversión de la Republica Dominicana, a PROMIPYME, a ONAPI, a DIGENOR, y a todas las instituciones oficiales vinculadas al tema empresarial, promover y fiscalizar la aplicación de tecnologías amigables al medio ambiente en las empresas dominicanas.

5. Lo mismo deberán hacer las instituciones que agrupan a los empresarios. Proponemos al CONEP, a la AIRD, a la Asociación de Zonas Francas, a la Confederación Patronal, a la ADIL, a la Junta Agro empresarial Dominicana, a la ANJE, entre otras, dedicar fondos, esfuerzos y personal, en la identificación y promoción del uso de tecnologías amigables con el ambiente en las empresas del país.

6. Solicitamos al Estado Dominicano ofrecer, mediante una Ley especial, exenciones fiscales e incentivos concretos a las empresas que utilizan tecnologías ambientalmente amigables.

7. Solicitamos y proponemos el desarrollo en República Dominicana de un modelo de transporte colectivo efciente que permita reducir las emisiones contaminantes del modelo ineficiente de la actualidad.

8. Exigimos fortalecer los planes y acciones de la Comisión Nacional De Energía, de la CDE y de la Superintendencia de Energía, al igual que de la EGEHID, para lograr energías más limpias y sostenibles para la República Dominicana.

9. Solicitamos a los bancos dominicanos crear mejores condiciones de financiamientos a la adquisición de tecnologías más sostenibles a fin de garantizar recursos para la renovación del aparato tecnológico del país.

10. Solicitamos al Ministerio de Educación y al Ministerio de Educación superior realizar mayores hacer esfuerzos para introducir el tema de la relación tecnología y medio ambiente en las escuelas y universidades dominicanas.

11. Solicitamos al Estado Dominicano, en la medida de lo posible, favorecer los productos importados por sus dependencias que y por el sector privado sean productos amigables con el medioambiente y que procedan de compañías que utilicen tecnologías y fuentes de energía amigables con el medioambiente para sus procesos de producción.

12. Solicitamos al Estado Dominicano y a las organizaciones de consumidores implementar campañas de promoción del consumo de productos amigables con el medioambiente y elaborados con tecnologías verdes.

13. Requerimos al Instituto Dominicano de telecomunicaciones (INDOTEL) implementar un plan de promoción de la “tecnología verde” en donde se reconozcan los proyectos más innovadores presentados por los participantes y promover su ejecución, tanto para el sector público como para el privado.

14. Exigimos el estricto cumplimiento de la ley 64-00 sobre medioambiente y los tratados y convenios internacionales firmados y ratificados por el país, destinados a reducir el impacto de la contaminación ambiental producto del mal manejo de las tecnologías.

15. Exigimos que el Estado Dominicano cese los contratos y licencias vigentes para la explotación minera a cielo abierto y prohíba por Ley este tipo de explotación minera en todo el territorio nacional, como el caso de otros países de la región.

16. Proponemos elaborar en conjunto un anteproyecto de la Ley para promover la Tecnología Verde, presentarlo ante el Congreso Nacional.

17. Proponemos a las organizaciones de jóvenes apoderarse del tema y de la vinculación tecnología y medio ambiente y articular esfuerzos comunes a fin de exigir, presionar y fiscalizar los compromisos del estado y las empresas a favor del medio ambiente.

18. Nos comprometemos desde nuestras organizaciones a preparar y ejecutar proyectos de promoción, investigación y sensibilización sobre la tecnología verde.

19. Nos comprometemos a vincular a otras organizaciones e instituciones, especialmente las académicas, a estos proyectos y promoveremos la implementación de tecnología verde en ellas, tales como la instalación de huertos escolares o el reciclaje para las instituciones académicas de todo nivel.

20. Nos comprometemos con depositar esta Declaración de La Caleta ante el Ministerio de Medioambiente, Indotel, todas las Universidades del País, y entidades relacionadas al tema y a elaborar un plan de trabajo e incidencia para hacer posible todas nuestras propuestas y exigencias.


Dado en La Caleta, Santo Domingo, República Dominicana, 12 de diciembre de 2010